Presentación

Enclavado dentro del famoso Parque Nacional Los Glaciares, el cerro Polo es una excelente alternativa de ascenso de media montaña. Destaca por tener una vista realmente privilegiada de la zona y ser apto para casi cualquier persona que desee alcanzar su cumbre. Ésto es un claro ejemplo de que este rincón patagónico no está reservado sólo para los más expertos montañistas que cada temporada se aventuran en las difíciles montañas y agujas del sector.

El ascenso al Polo se puede realizar desde el mismo pueblo del Chaltén, tras una corta jornada de actividad. También desde los campamentos Poincenot y Río Blanco, regularmente concurridos por senderistas y escaladores respectivamente. Con un terreno verde de vegetación de media altura y una corona cumbrera de roca áspera pero de buena calidad, la montaña invita a un ascenso tranquilo mientras se está a la espera de las tan anheladas y esquivas ventanas de buen tiempo. Ello es posible debido a que el mal tiempo suele afectarlo con menor intensidad, al encontrarse al oriente de la zona de las grandes agujas rocosas cercanas a Campo de Hielo Sur. Sin embargo, su parte alta no escapa del influjo del inclemente viento patagónico.

Su cumbre es un mirador privilegiado de las graníticas agujas que rodean al monte Fitz Roy, como el Techado Negro, Mojón Rojo, Aguja de la S, Saint-Exupéry, Rafael Juárez, Poincenot, Val Biois, Mermoz, Guillaumet y los cerros Castillo Negro y Eléctrico. Además es posible observar numerosos glaciares, destacando la impresionante cascada de seracs del glaciar Piedras Blancas y su laguna homónima.

Se desconocen tanto quienes fueron sus primeros ascensionistas así como el origen de su nombre.